Hay una película, quizá bastante "menor" y que solo he visto una vez y hace muchísimos años, pero que se me quedó bien grabada en la memoria. Su título original es Being There, que en España (¡ay!) se cambió por Bienvenido Mr. Chance). (Al vicio de traducir testicularmente unieron el de omitir la coma del vocativo).
El protagonista de la película -personaje que representa Peter Sellers- es un jardinero con escaso cociente intelectual que, por circunstancias casuales, da con alguien que interpreta sus simplezas como agudísimos comentarios llenos de dobles intenciones y significados sofisticados, y toma esos comentarios como consejos inteligentísimos y los sigue. Interpreta como alegorías o metáforas muy penetrantes lo que solo son bobadas.
Yo tuve la suerte de que me pasara lo mismo.
