y a Carlos Polimón).
De este tema ya he escrito. Perdonad que me repita, pero es que los medios no paran. Ellos regurgitan esta murga cada cierto tiempo: LOS EDIFICIOS MÁS FEOS DE MADRID, y vuelvo a hacerme eco. Quizá no debería, porque es siempre lo mismo y ya aburre, pero es que esta vez el número uno es de mi maestro, mi querido Juan Daniel Fullaondo, con José Luis Íñiguez de Onzoño, y eso me ha llegado al corazón.
No conocí a Íñiguez, pero por las cosas que le he leído y por lo que Fullaondo contaba de él estoy seguro de que se habría reído. Desde luego Fullaondo sí sé que incluso se sentiría orgulloso de encabezar ese ranking. No es fácil. El listón está muy alto.
Creo que para alcanzar la meta les ha beneficiado mucho que el que se exhibe en cabecera, el famoso edificio de viviendas de Sanchinarro, no se mencione después en el texto, lo que por otra parte muestra una preocupante falta de atención y de continuidad discursiva en quien ha escrito el libelo. ¿Le parece feo lo de Sanchinarro o sí pero no? Me deja en ascuas. Lo pone como estandarte del feísmo pero luego no lo incluye en la lista. Qué poca seriedad.