Se me ha pasado la fecha de hacer balance del año. Esto se suele hacer a finales de diciembre, pero se me ha ido la pinza. No suelo prestar demasiada atención a estas cosas, y debería hacerlo. Sobre todo para aprender más de vosotros.
Este blog ha alcanzado un número fiel de seguidores. Os lo agradezco mucho a todos. (No termino de explicármelo, pero las cosas que le hacen a uno feliz son siempre incomprensibles, y ahí radica su gracia y su misterio).
Hemos llegado a una "velocidad de crucero" tal que cada entrada es visitada al menos doscientas veces, pero lo normal es que tengan entre cuatrocientas y seiscientas visitas. Parece increíble. Bastantes (casi un 30 %) llegan a las mil visitas, lo que me parece realmente pasmoso.
Normalmente cada entrada tiene dos o tres comentarios, tal vez cuatro. Cada día miro, y cada nuevo comentario me hace muy feliz. Sois un poco tímidos y no os prodigáis mucho, pero cada vez que lo hacéis me quito el sombrero ante vuestra lucidez. (Ya podríais hacerlo más veces). En Facebook y en twitter sí me hacéis más comentarios, siempre muy amables. (Es curioso, pero en cientos de comentarios apenas ha habido dos o tres desagradables).
En el año 2013 he publicado cuarenta y cinco entradas. Eso supone 3,75 entradas al mes, o 0,88 entradas a la semana. Es decir: Soy, en general, bastante contumaz y perseverante.
De entre todas ellas, hay una que se destaca exageradamente:
1.-
¿Estudiar Arquitectura? Publicada el 22 de junio. Un post muy sentido sobre las incomprensibles razones que puede haber (si las hay) para estudiar arquitectura hoy, percudido por los recuerdos de mi lejano paso por la Escuela de Arquitectura de Madrid. Se ve que a pesar de la lejanía generacional nos unen muchas cosas. (Tal vez el miedo sea la principal de ellas). Blogger me proporciona una herramienta con la que puedo ver con qué palabras tecleadas en el buscador los lectores encuentran este blog, y me doy cuenta de que muchos de los que han leído esta entrada son padres angustiados.
Malos tiempos para la lírica. Pero no lamento que sea esta atenazadora angustia la que ha dado tantas lecturas a esta entrada, sino que prefiero creer en una especie de hermandad que nos une a todos y nos hace ir juntos de la mano.
En un organismo oficial muy vinculado a la arquitectura y al urbanismo vi mi artículo fotocopiado, rulando por ahí. Me dio gusto que funcionarios que, se supone, y más en estos tiempos, que tienen la vida resuelta al calor de la seguridad institucional, se emocionaran también con estas palabras y se sintieran implicados o concernidos también por esta angustia y este desconcierto.
¡
13.290 visitas y
72 comentarios! No sé qué ha pasado, pero realmente ha calado. (Los datos son del 7 de enero, a las 7 de la tarde, pero siguen creciendo. Esta entrada tiene nuevos lectores cada día).
2.-
Proyecto Fin de Carrera: Una opinión. Publicada el 26 de septiembre. Se ve que los temas relativos a la carrera de arquitectura os interesan especialmente. Esta entrada trata de mi sorpresa ante el cariz que está tomando el Proyecto Fin de Carrera en la de arquitectura. Parece que uno se lo jugara el todo por el todo con él, cuando ya ha estado demostrando durante mucho tiempo, muchas asignaturas y muchos cursos que ha alcanzado el nivel exigido.
Y también me causa gran sorpresa que cuando alguien ha hecho el proyecto siguiendo las indicaciones de su tutor durante meses, hasta que al fin éste le autoriza a que lo presente ante el tribunal, si el resultado es malo la escuela no despida a ese tutor incompetente y falsario.
5.301 visitas y
23 comentarios. Otra barbaridad.
3.-
La caja. Publicada el 13 de enero. Va, con la Ley de Servicios Profesionales a la vista, sobre las desafortunadas declaraciones de un dirigente de un colegio de ingenieros industriales, que dijo que si sus colegiados ya pueden calcular la estructura, la instalación eléctrica, la de aire acondicionado, etc, de un hospital, ¿por qué no pueden hacer la caja, que es lo único que les falta? Por una parte, esa expresión traiciona lo que este señor entiende verdaderamente por proyecto arquitectónico, y por otra, mi opinión es que esta no es una guerra entre ingenieros y arquitectos (ambos colectivos somos víctimas), sino entre empresas multiservicios y seres humanos libres. La caja nos está esperando a todos.
2.363 visitas y
16 comentarios.
4.-
La cabañita y la higiene sexual. Publicada el 11 de diciembre. Es una opinión (un tanto irrespetuosa) sobre la famosa cabaña de Le Corbusier.
Mira que os gusta que le meta caña a un maestro. Sois muy malos.
1.788 visitas y
8 comentarios.
5.-
Sobre la originalidad en arquitectura. Publicada el 23 de marzo. ¿Se pueden plagiar ideas en arquitectura? ¿Tiene eso alguna importancia? En mi opinión las grandes ideas directrices de un proyecto tienen menos importancia que su desarrollo, y lo bueno o malo que sea un proyecto (y el edificio construido con él) depende más de las coherencias o incoherencias internas y de lo bien o mal que casen y cuadren las cosas.
1.471 visitas y
6 comentarios.
Repito que el número de visitas y el de comentarios que indico es del 7 de enero a las 7 de la tarde.
Y repito que muchas gracias a todos por vuestro seguimiento y vuestra participación.
Esto me da muchos ánimos para seguir adelante. Espero que mis chorradas os sigan interesando y haciendo gracia este año.
(Si te ha interesado esta entrada puedes clicar el botón g+1 que aparece aquí debajo).
Addenda a los pocos minutos de publicar la entrada: Si me he estado mirando el ombligo en esta entrada y complaciéndome de mí mismo, los grandes Stepien y Barnó me han enseñado (de nuevo) lo que es poder de convocatoria y de comunicación. Hoy han tenido la deferencia de hacerse eco de una de las entradas de este blog en
el suyo y en
facebook y la han puesto en quinto lugar en un día.
Tenía hecho el borrador del
ranking, con datos tomados ayer, y ahora, justo antes de publicarlo, he mirado el número de visitas sólo de las cinco que ya tenía, para actualizarlas. Pero no me he dado cuenta de que estos monstruos, con su poder, habían cambiado el quinto puesto.
5.-
Feliz Navidad y tal. Con la excusa de felicitar la Navidad me puse llorón a contar diversas penurias de la profesión de arquitecto, que tanto nos apasiona a todos. Digo que estoy harto y algunos me comentáis que me quedo corto.
1.708 visitas y
22 comentarios. (El 7 de enero a las 8 de la tarde).